martes, enero 03, 2006

"Cualquier tiempo pasado fue mejor..."

“El amor verdadero es lo mejor del mundo, después de los caramelos para la tos" al llegar a esta frase Oswaldo no pudo contener la carcajada ¿Lo mejor del mundo después de los caramelos para la tos? No podía creerlo, el bueno de Willy al final había incluido la frase, algo cambiada es cierto, pero lo había hecho. Quedaban tan lejos ahora aquellos días en un minúsculo apartamento del barrio latino. Cuánto añoraba París… Quién se lo iba a decir, allí estaba, en mitad de la selva cinco años después, con el libro de Willy entre las manos, y le había hecho caso, había incluido la frase… Siguió contemplando el libro con emoción, como el que contempla un raro tesoro. Aparecía firmado por un tal Simon Mongerstern, pero él sabía que se trataba de un seudónimo, Willy ya había firmado otros libros como Harry Longbaugh, así que no le pareció raro, además él ya le había hablado sobre su intención de escribir una novela de aventuras que evocase los cuentos de hadas, y allí estaba: “La princesa prometida” Sus lágrimas resbalaron sobre la cubierta del libro mientras recordaba aquellas tranquilas tardes jugando al ajedrez, “El amor verdadero es lo mejor del mundo, después de los caramelos de menta”, eso decía willy cada vez que se disponía a encender uno de esos porros de maría que liaba tan mal, en verdad que parecían caramelos cuando retorcía el papel que les sobraba en ambos extremos. - Cinco años ya, cómo pasa el tiempo. Si le hubiera hecho caso a Willy… Oswaldo se abrazó al libro como lo haría un náufrago a los restos de su naufragio. - Cinco años - repitió mecánicamente mientras en su mente se atropellaban los recuerdos… los juegos en las calles de Sao Paulo, los años de estudiante en Lisboa, las noches de Barcelona, lo paseos por el barrio de Saint Germain des Prés, las tertulias del café de Flore, el viaje a Bogotá, el secuestro y cada uno de los días que había pasado en manos de la guerrilla de las FARC. - Es la hora – Le espetó alguien desde el otro lado de la destartalada puerta. Un libro, pensó, curiosa elección para una última voluntad.

Por cortesía de: Sereno.

2 comentarios:

virginia dijo...

Sereno, el texto....muy bonito.juasjuass..no, en serio, es original, pero tú tb sabías que la frase era de la princesa prometida. ;),

d dijo...

Tienes que pensar frases más difíciles y anónimas, que esta ya tenía la historia hecha. Eso condiciona y bloquea en muchos casos. Oye, también es un reto pero la frase está tan bien en su libro...