Este libro es una
iniciación a la meditación quietista, relata las diferentes experiencias
que el autor ha experimentado desde que hace silencio, él lo llama sentadas,
según el autor cada vez siente más la necesidad de hacer este viaje hacia el
interior, de tal modo que a veces ha hecho retiros de hasta una semana en
soledad y silencio. Según el autor entrar en la meditación es despojarse del yo
falso para entrar en el yo verdadero, despojarse de todo pensamiento es difícil
pero cuanto más nos vaciemos más ligeros estaremos para afrontar la vida.
Cuando seamos capaces de ver el yo y el mundo como una unidad, seremos más
respetuosos con nuestra propia vida y con la de los demás, descubriremos la vida real. Hay que vivir
sin imponer nada a la vida sin imponer nuestras pretensiones o manera de
entender,(no juzgar) solamente dejando que todo entre en nosotros y
que las cosas pasen como deban pasar, sin poner resistencia .
También habla de la
potencia sanadora del silencio, según d´Ors la meditación es una escuela de
apertura a la verdadera realidad, la vida real es más verdad que los sueños,
porque los sueños no existen, aprendamos por tanto a valorar todo los momentos
de nuestra vida.
"No hay ningún
problema en absoluto" es otra de las premisas de las que parte el autor en
esta obra, sólo el dejarse llevar, hay que despojarse de todo cuanto podamos y solamente así empezaremos a ver el mundo. (desprendimiento). (ataduras
inútiles, miedos, etc).
El ahora es lo
único que existe. Reirnos de nosotros mismos y de todo. La risa como pilar fundamental de la vida. Risa y peregrinar.
(c) Virginia Fernández. Poética.
(c) Virginia Fernández. Poética.