viernes, septiembre 30, 2011

Hoy brilla el sol en el Zapillo...


Sonrisas dibujadas

"En los brazos sólo este amor así relajado. Quien lo sabe todo que no hable. Quien no sabe de nada que se calle".
Para ver as meninas
-Paulinho Da Viola-


S
ilencio por favor
deja que los pensamientos
se me agolpen en la mente,
déjalos que corran por mi cerebro
y me inunden en esta mañana
en la que los párpados me pesan,
déjalos que dibujen una sonrisa.

Silencio por favor,
quiero pensar en tus manos,
no me distraigas ahora mientras escucho
canciones de otras vidas pasadas,
de otros atardeceres
que ya no me importan tanto.

Quiero salir a pasear por nuestro barrio
y contarte cómo siguen sin ti
los gatos callejeros,
las farolas de la noche
cuando nadie pasea.

Déjame porque quiero volver a escuchar
cómo suenan las cabinas cuando me llamas,
como me nombras bajo este cielo de sonrisas dibujadas.

© Virginia Fernández “Sonrisas dibujadas”. Extracto de: Después de una conversación sobre un sueño.

lunes, septiembre 26, 2011

Existe


Invierno de papel

Ese perdido reino del rock almeriense, en las noches que no duermo, bailo su música.

¿
Qué hubiera sido de mí si la noche de ayer
no hubiera existido?
Repleta de figuras vestidas de negro,
perdidos,
todos ellos
y yo…

¿Qué hubiera sido de mi sin esta noche lluviosa
tras el cristal del balcón de la habitación donde vivo?
En este invierno
de papel
que existe
y me mira con ojos perplejos,
donde suena esa música,
donde no existe el tiempo.

No mires bajo esta luz usada de los focos,
de mundos amueblados
en esta nueva dimensión
porque te siento perdido,
frágil y pequeño,
bajo esta misma lluvia,
bajo este mismo cielo de acordes 
y de rock.


© Virginia Fernández “Invierno de papel”

viernes, septiembre 16, 2011

I'll hide from the world behind a broken frame...


Mundo de mentira

C
ruzan la calle sin mirarse,
extrañándose a cada paso
que dan.

No se miran a los ojos,
ni se rozan,
en un mundo que es de plástico,
como lo es una sonrisa congelada
en una fotografía.

Leen un libro
como quién mira un paisaje lejano y desconocido
visto desde una ventanilla de un coche
o desde un cuadrado que habla.

Ellos no se aman,
por miedo a dolerse
y sus silencios se dejan ver.

No se duelen,
no,
ni mueren de amor
como en las películas.

Para ellos es
este mundo de mentira.

© Virginia Fernández “Mundo de mentira”


domingo, septiembre 11, 2011

No sé lo que haces los domingos por la tarde...


Tarde de verano

M
iro al cielo,
sólo por el placer de mirar al cielo.
 Una conexión silenciosa y tranquila
se abre paso entre las nubes.

Escucho música
y es lo más parecido que tengo de escuchar
tu voz.
A decir verdad
no tiene nada que ver con tu voz,
pero qué más da.

El temblor de mis manos
y una voz que está ciega
impregnan la tarde,
así como el aire mece mi hamaca,
así como oscurece lentamente,
mientras,
nuestros labios sin moverse se hablan.

© Virginia Fernández “Tarde de verano”

viernes, septiembre 02, 2011

Hoy llueve


El espectador

S
in que nada me detenga
me deslizo hacia calles
con toques de realidad fingida,
sólo siento una extrañeza
de esta vida,
afirmándome en la creencia
de ser solo espectador,
tal vez desconocido.

El paisaje que veo
a través de la ventanilla
del coche,
o el color amarillo
del atardecer,
sólo es el escenario
de la vida que habito
y de la que me cuestiono
su existencia al menos
una vez al día,
tal vez dos.

No me encuentro en mi propio cuerpo.
Esta ciudad
tiene demasiados canales,
es húmeda,
además siempre
huele a lluvia.

Me pregunto cuántos
hechos contradictorios
conviven en mi misma piel,
con los mismos labios que besan,
irremediable
y mero espectador
de mi propia vida.

© Virginia Fernández “El espectador”
Imagen: Castillo Herrera.