viernes, marzo 10, 2006

Sueños

Entró, observó, saludó y se fue. La habitación estaba iluminada, pero cuando se marchó cambiaron los colores, se oscurecieron por su ausencia. O ¿Serían mis ojos que lloraron e hicieron que el cielo fuera gris en ese momento? Su rostro era perfecto como de marfil, como de mariposa, como de luz y desapareció, como la lluvia, como la ausencia que deja la muerte, como la ausencia que dejó al morir. Al parecer es un sueño, ¿No os ha pasado a veces, que cuando despertáis de un sueño parece que todavía estuvieras en él?, eso me ocurre cuando despierto de un sueño de repente, por algo que te ha sucedido en él, que te ha hecho estremecer por miedo, alegría, y demás circunstancias fuera de lo normal que hacen que el subconsciente nos eche una mano y nos diga, tranquila, no pasa nada, todo ha pasado, era un sueño, despierta. Me desperté con esa sensación y tenía ganas de contártelo, contarte que te había visto, que estabas vivo y me abrazabas susurrando que no me enfadara si te ibas lejos, pero no estabas, no se que era peor, el sueño o la realidad. Estoy toda la mañana con esa sensación de estar viviéndolo aún, entre somnolienta y despierta ando, vago por las calles como un fantasma sin saber adónde ir, es una sensación de vacío, de soledad, pero a la vez de bienestar, de tranquilidad, de reconciliación con el mundo y todo porque te he visto, no se lo puedo contar a nadie, porque es una sensación rara, y muy mía. Además no sabría explicarlo. En la calle hay mucho bullicio, por las mañanas siempre es así, a medida que va pasando el día todo se va tranquilizando poco a poco hasta que la ciudad se duerme. Admiro la capacidad de comunicación que tienen muchas personas, a mi me cuesta mucho transmitir lo que pienso y siento. Antes no era así. Quedo con tu hermana para tomar un café en La Rambla, yo se que se preocupa por mí, intenta parecer optimista, habla sin parar, me cuenta un poco de todo y al escuchar su voz voy recobrando el sentido, voy despertando y dándome cuenta de que existe el mundo , me abraza y me da un beso. Voy tranquilizándome poco a poco. Se que esta sensación se irá, desaparecerá como todo en la vida, pero todavía no quiero dejar de pensar en ti, es pronto, mi conciencia tampoco me deja. Estoy triste. Algún día nos volveremos a ver, lo sé, por eso estoy tranquila.

Fin.

Virginia Fernández.

2 comentarios:

d dijo...

Qué triste, pero todo eso pasará y olvidará esa tristeza. Todo pasa incluso aunque nos empeñemos en lo contrario.
Me gustó. De 0 a 10....... X ;)

d dijo...

Casualmente estaba escuchando una canción de La Oreja de Van gogh que va de este tema, jajaja.