domingo, abril 25, 2010

Momentos de equilibrio

En este preciso momento
estará usted mirando por alguna ventana anónima
e impersonal, desde su despacho
totalmente iluminado,
cada pequeño detalle estará perfectamente cuidado,
describirá alguna parábola en el aire,
observará cómo pasan
los transeúntes por la calle,
cruzando el paso de cebra,
y no captará esa violencia
intrínseca del ser humano,
no podrá apreciar esa oscuridad
de la humanidad,
caminando, quizás como en un gueto,
perdidos en su soledad.

Quizás usted no haya percibido
esa pequeña sutileza
casi imperceptible
que queda inmersa en cada uno de nosotros.

Seguramente cuando usted mire
por esa ventana tan impersonal y transparente,
no sea capaz de asimilarlo,
ni siquiera lo pensará,
pero está ahí en el aire,
fruto de nuestra propia naturaleza.

Pero quizás,
en ese mismo momento
en otro rincón de la ciudad,
o de cualquier lugar,
alguien se estremecerá
al escuchar el sonido de las gotas del agua
al golpear en el cristal,
o al escuchar el crujido de un pétalo al caer,
al ver una sonrisa,
entonces algo merecerá la pena.

© Virginia Fernández “Momentos de equilibrio”

1 comentario:

 Mayte dijo...

Y todo cobrará sentido y orde a la ausencia de tí.

Biko.