martes, septiembre 29, 2009

Ciencias puras

Busco tu suma.
Imperceptible, casual.
A medida que avanzo
los átomos que forman
el todo que hay en ti,
me dan la bienvenida,
se miran,
me descalzan entre
risas y alborotos.

Húmedos átomos formadores
de lágrimas, de risas,
de adioses.
Todos al unísono forman
un algo indescriptible,
un fulgor ardiente,
estrellas, cielo, sonrisa, ojos.

Busco el todo que te forma,
que es más que manos, y piel,
más que una obra de arte,
o un paisaje.
Ese todo que eres tú,
suma de miles y millones
de pequeñas partículas que te forman,
y que hacen que sumes tú, y no tantos
otros diferentes, andadores irreales,
anónimos.

Eres más que manos que vienen hacia mí,
más que caricia,
eres ojos, sonrisa iluminada,
esa suma que te forma no deja
que me duerma,
me atraviesa la garganta.

Busco tus ojos, tus manos,
ese universo cerrado y bello.
Busco la línea del horizonte
que atraviesa tu mirada.
Húmedos átomos formadores
de lluvia de ti.

© Virginia Fernández “Ciencias puras”

6 comentarios:

Mauro dijo...

Pareciera que cuando estás con quien debe ser, esa persona es simplemente la suma de todo lo que te hace feliz.

Un beso Virginia.

Pokito Pokit dijo...

Aunque decir qué es lo mejor, y qué es peor, son valoraciones totalmente absurdas, hay en ocasiones en las que ese juicio de valor es porque es, y no hay que darle más vueltas. Para mí este poema tiene muchos de los mejores versos que te he leído, el poema tiene mucha belleza. Enhorabuena por parir así de bien la tinta, Virginia.

Un beso

bajamar dijo...

cuando algo es de razón te hace pensar. Pero cuando es de sentir...uu aunque le des mil vueltas te mueve y te arrulla o te mutila y te asesina, te eleva, te ancla...en fin se puede muchas cosas. el punto es: me encanta Vir :)
abrazo

 Mayte dijo...

La suma y resta conjugada a la perfección, como el mejor resultado, el amor.

Bikiños Vir.

Anónimo dijo...

Es raro que lea dos veces un poema que me encuentre en una página, un blog o parecidos, pero “ciencias puras” es…
(si lo leo dos veces o más es que es realmente bueno).

Jaime dijo...

Qué bonitos son los átomos descalzadores. Y si además te llueven encima...!
Qué bien volver y saber que sigues en casa.
Un beso grande, vecina.